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| Tom à la ferme |
Xavier Dolan nos presenta su cuarta película a sus escasos 25 años, ganadora del premio de la crítica en la edición número 70 del Festival Internacional de Cine de Venecia y también ganadora del Premio Maguey, otorgado al cine Queer, en la edición No.28 del Festival Internacional de cine de Guadalajara.
La muestra de Cine de la Cineteca me dio la oportunidad de poder ver por fin una película de uno de mis directores favoritos en la pantalla grande, la cita era con una amiga, pero por cuestiones del destino tuve que asistir solo y como ya es costumbre cuando esta la muestra, estaba atascado, pero yo adquirí mis boletos desde antes. Había gente de todas las edades, y tan llena estaba la sala que había gente sentada en las escaleras, no porque hubiera sobrecupo, sino que estar hasta adelante en una sala grande si llega ser incómodo.
Lleguen puntuales porque desde el primer minuto nos advierten de que va la historia. “Hoy murió una parte de mí y no puedo llorar, pues he olvidado todos los sinónimos de tristeza. Lo único que puedo hacer sin ti es reemplazarte”.
Tom (Xavier Dolan) Quien trabaja en una agencia de publicidad en Montreal, hace un largo y triste recorrido por carretera hasta llegar al apartado pueblo de la familia de su novio que acaba de morir. Y se da cuenta de que la madre del difunto (Lise Roy) no sabía su sexualidad, por otra parte Francis, su hermano (Pierre-Yves Cardinal) está enterado de este hecho y empieza a amedrentar a Tom para que su madre no se entere y hacerlo participe de una farsa, es así como surge una extraña relación entre Tom y Francis, donde poco a poco la tristeza y la soledad hacen que Tom empiece a tener sentimientos encontrados por esta extraña familia.
Francis se siente atado a su madre, ya que él se hace cargo de la granja y los días son todos iguales, no tiene novia y solo espera la hora de dejar a su madre en el asilo, por su parte Agathe (la mamá) ve en Tom la figura de su hijo, le presta su ropa y da asilo, Tom es deslumbrado por las maravillas de la naturaleza y por esa sensación de amor, decide quedarse. Hasta que un cuarto personaje llega, La supuesta novia de Guillaume (el fallecido) que pronto se percata de que algo anda mal con esa familia, e incluso desconoce la actitud de Tom.
Es una muy buena película dramática llena de suspenso, donde no sabemos que es lo que pasará, que es lo que orilla a las personas de esa familia comportarse de esa manera, no sabemos si ese sufrimiento a propósito que vive Tom es parte de ese proceso de duelo y si logrará zafarse con bien de este conflicto.
Como siempre en todas las Películas de Xavier Dolan hay que destacar la música (estuvo a cargo de Gabriel Yared) en cada cuadro el sonido acompaña a la imagen, es un personaje más, aquí cambia totalmente el estilo que le habíamos visto en sus otras películas (Los amantes imaginarios, Laurence Anyways) aquí le da un tinte más obscuro, gracias al paisaje frío y nublado de la granja. Lo que más me llamó la atención en la dirección es que en cada secuencia donde era atacado o sometido por Francis, la pantalla se iba haciendo pequeña poco a poco, eso le daba un toque más de tensión a lo que estábamos viendo. Y bueno como cada película de él, vemos una mirada a la diversidad sexual y en esta nos plantea la homofobia, la sumisión en las familias y en la sociedad.
Como todo gran cineasta, tiene muchos detractores y muchos fans, se le tacha de narcisista, ya que en esta como en sus otras películas, escribe, dirige, actúa, produce y edita. Pero cuando el resultado es así de bueno, no queda más que aplaudir y reconocer una buena obra cinematográfica.
@lalomixu